Con motivo de una visita a la costa central de Chile (El Quisco), tuve la posibilidad de aprender algo más de la helioterapia.
Los pueblos andinos tienen una directa relación con el sol, le llaman Tata-Inti.
La helioterapia es una terapia que aprovecha los beneficios del sol para evitar la aparición de problemas en los huesos, en el sistema digestivo, a nivel renal, etc.
Es una disciplina terapéutica que viene practicándose hacen ya diez siglos. En Chile el doctor Silvio Rossi lo planteó como una buena alternativa para enfrentar problemas en la piel: “después de nuestra saliva normal,… el mayor cicatrizante de heridas es el sol directo”.
En el hemisferio sur hay que aprovechar los beneficios del sol ya que sus rayos llegan más directamente sobre nuestra piel.
Considero importante señalar los efectos de los rayos UV que nos tienen con problemas en Chile. Es algo que debemos prestar atención y tener resguardos frente a aquello.
Como en artículos anteriores, he manifestado que fortalece la acción de la vitamina D en nuestro organismo, desde los primeros años de la infancia y en la edad adulta. Comprobado está que la poca ingesta de este elemento provoca caídas en las personas de la tercera edad (estudios realizados en Londres).
Con el uso adecuado de sol:
a. Cinco minutos por la espalda y cinco minutos de frente,
b. Directamente en una herida del tipo infecciosa, el sol con su gran poder germinicida (Dr. Silvio Rossi), trabaja como un desinfectante,
c. Depura las heridas,
d. Dilata y/o abre los poros de nuestra piel (órgano más grande del cuerpo),
e. Estimula a las personas con depresión.
Es una terapia que puede complementarse con otras para su mejor aprovechamiento.
La helioterapia es una terapia que aprovecha los beneficios del sol para evitar la aparición de problemas en los huesos, en el sistema digestivo, a nivel renal, etc.
Es una disciplina terapéutica que viene practicándose hacen ya diez siglos. En Chile el doctor Silvio Rossi lo planteó como una buena alternativa para enfrentar problemas en la piel: “después de nuestra saliva normal,… el mayor cicatrizante de heridas es el sol directo”.
En el hemisferio sur hay que aprovechar los beneficios del sol ya que sus rayos llegan más directamente sobre nuestra piel.
Considero importante señalar los efectos de los rayos UV que nos tienen con problemas en Chile. Es algo que debemos prestar atención y tener resguardos frente a aquello.
Como en artículos anteriores, he manifestado que fortalece la acción de la vitamina D en nuestro organismo, desde los primeros años de la infancia y en la edad adulta. Comprobado está que la poca ingesta de este elemento provoca caídas en las personas de la tercera edad (estudios realizados en Londres).
Con el uso adecuado de sol:
a. Cinco minutos por la espalda y cinco minutos de frente,
b. Directamente en una herida del tipo infecciosa, el sol con su gran poder germinicida (Dr. Silvio Rossi), trabaja como un desinfectante,
c. Depura las heridas,
d. Dilata y/o abre los poros de nuestra piel (órgano más grande del cuerpo),
e. Estimula a las personas con depresión.
Es una terapia que puede complementarse con otras para su mejor aprovechamiento.
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