viernes, 27 de junio de 2008

¿Cómo puedo sentirme seguro(a)?

1) Reconocimiento del YO que está activo: yo estoy aquí y hay otro que me puede ayudar (aquella persona llegará ahora o en otro momento).
2) Mi forma de pensar: los pensamientos (aquello invisible) se somatizan y se forman en objetos; se expresan vocalmente o por medio de mis manos. Una persona segura se siente en su hablar o cuando saluda con sus manos.
3) Con los objetos: Estuve atendiendo una familia y le indiqué que había una silla que estaba rota porque un familiar la había dejado así en una fiesta, la dueña de aquella silla dijo que si y le pregunté “¿esa persona la va a arreglar?”, su respuesta fue afirmativa. La señora no se siente segura de ocupar aquella silla pues se puede caer, pero también se siente segura de su arreglo.
Los objetos tienen seguridad en la medida de que yo les impregno seguridad (imprimir carácter) y estoy trabajando diariamente por aquello. El ejemplo queda más claro en aquellos trabajadores de la construcción que todos los días deben chequear sus elementos de trabajo. Están los profesionales de la salud cuando aplican asepsia en sus lugares (consultorios, hospitales, clínicas, etc.) a través de sus elementos que ocuparán atendiendo personas. Es la persona que aplica seguridad a un objeto.
4) Su caminar: Cuando la persona ejecuta aquel acto de mover sus pies sobre una superficie, si esta lo hace equivocado, sus reacciones posteriores son de pura molestia (dolores en sus pies, en su cadera, en sus rodillas, en su columna o en su cabeza). En cambio si pone sus pies firmes y toma conciencia de aquello, se evitará problemas y se sentirá más seguro(a).
5) Su hablar: El tono de voz indica que la persona está insegura o bien tiene opinión clara sobre algo, se siente segura de lo que dice.

miércoles, 11 de junio de 2008

Extiende tu mano.


Muchas, pero muchas veces me ha tocado extender la mano para saludar, para agradecer, para colaborar con un campesino, un minero o un pescador.
Muchas veces me ha tocado extender la mano para colaborar con mis sobrinos y sobrinas; muchas veces me ha tocado extender la mano para ayudar a una persona con dolores físicos.
También he recibido unas manos cálidas, acogedoras y seguras.
Una mano extendida y segura se agradece, suave y cariñosa mejor.
Cuando bailas aquellos bailes que necesariamente debes utilizar las manos constantemente, le das seguridad a tu pareja con tus manos.
Cuando están aquellas manos listas para recibirte en el momento del parto, qué seguridad siente la mamá que está pariendo.
Cuando están aquellas manos para recoger un accidentado en la calle, qué alivio se siente.
Cuando están aquellas manos para acompañarte en el momento del duelo, qué rico se siente uno.
Las manos pueden ser un valioso aporte para con el otro. Allí parte la recuperación del otro. Allí parte la sanación del otro.
Tú ¿para que extiendes tus manos?

Arreglando rincones.


Cuando recorres los lugares céntricos de alguna ciudad, te encuentras con tiendas donde se ofrecen arreglos florales. Quizás ellos(as) incluyen en ese titular también los arreglos vegetales: plantas secas, solo tallos y hojas, plantas verdes como las medicinales por ejemplo.
Mi título de hoy va en dirección a rescatar los arreglos con plantas secas o aún verdes.
Este artículo me lo inspiró una mariposa que volaba de rama en rama en la plazoleta donde vivo. Les recuerdo que en este hemisferio estamos en otoño, con humedad alta, secas las plantas y otras perennes que resisten el frío y tal humedad.
La planta seca (tallos u hojas) proporcionan belleza. Quiero con esto animar a las personas por el respeto a los senescentes. Ellos como las plantas secas pueden seguir aportando con su belleza que lo da su experiencia y su caminar de años y años.
También te animo a ti a que busques a tu alrededor hojas y ramas secas o perennes para que adornes tu interior tanto físico como emocional.
· Como escribió una amiga de España (María) sobre el verde: “Representa armonía, crecimiento, exuberancia, fertilidad y frescura; El color verde tiene un gran poder de curación. Es el color más relajante para el ojo humano y puede ayudar a mejorar la vista”.